El presidente del Comité Cívico de Tarija, Adrián Ávila, ha expresado su preocupación por el manejo de los ahorros de los ciudadanos por parte del gobierno nacional a través de la Gestora Pública, lo que podría tener graves consecuencias para la población.
Según Ávila, la reciente quiebra del Banco Fássil es una muestra de lo que podría pasar si el gobierno maneja los recursos de la población de manera inadecuada. Además, ha cuestionado por qué el gobierno no administró la Gestora Pública durante los años de bonanza económica del país y ahora quiere hacerlo en medio de una crisis financiera.
En palabras de Ávila: “Los ingenuos del gobierno nos quieren quitar la plata y aquí vamos a reclamar qué garantía nos da el gobierno, cuando uno quiere algo ofrece todo, pues cuando quiere conseguir algo ofrece el cielo en la tierra, el gobierno siempre lo ha hecho en Tarija siempre nos ha engañado”.
La falta de confianza en el gobierno es otro factor que preocupa a la población, ya que los ciudadanos no tienen garantías de que el gobierno pueda manejar los recursos de manera transparente y evitar la corrupción y el robo.
El líder cívico ha alertado sobre las graves consecuencias que podría tener para Bolivia seguir por este camino, que, según él, llevaría al país a convertirse en una Cuba o Venezuela.
Ante estas preocupaciones, el gobierno ha señalado que la Gestora Pública tiene como objetivo asegurar una administración responsable y segura de los ahorros de los ciudadanos y que se garantizará la transparencia en el manejo de los recursos.
Sin embargo, Ávila ha solicitado al gobierno que brinde mayores garantías y transparencia en el manejo de los ahorros de los ciudadanos, y ha llamado a la población a estar atentos y exigir que se respeten sus derechos.