El director Departamental de Régimen Penitenciario de La Paz, Daniel Callisaya, anunció que siete reclusas del penal de mujeres de Obrajes dieron positivo por COVID-19, lo que llevó a la implementación inmediata de medidas preventivas. Entre ellas, el aislamiento de las afectadas y el inicio de una campaña de vacunación en la cárcel de San Pedro.
En declaraciones, Callisaya explicó: «Hemos tenido lamentablemente un rebrote y tenemos siete casos positivos en el centro de Obrajes Femenino, entonces se ha hecho el aislamiento y todo el protocolo». Además, señaló que se está gestionando la vacunación para toda la población penitenciaria de La Paz, incluyendo reclusos, personal policial y administrativo.
La campaña de vacunación se lleva a cabo en coordinación con el Servicio Departamental de Salud (Sedes) para evitar un rebrote del COVID-19 en el sistema penitenciario. La autoridad penitenciaria destacó la importancia de inmunizar tanto a los reclusos como al personal penitenciario para contener la propagación del virus.
Asimismo, se emitió un llamado a los familiares que visitan a los reclusos para que adopten medidas de bioseguridad, incluyendo el uso de barbijos y la aplicación de alcohol en gel. Callisaya expresó: «Se les está recomendando a todos los familiares que vengan con el uso del barbijo correspondiente, para que implementen el alcohol en gel, para poder evitar un rebrote dentro de los recintos carcelarios».
La situación en el penal de Obrajes destaca la importancia de implementar estrategias preventivas y de vacunación en el ámbito penitenciario para salvaguardar la salud de los reclusos y prevenir la propagación del COVID-19. La campaña de vacunación en la cárcel de San Pedro busca fortalecer la inmunización y mitigar el riesgo de contagios en el sistema penitenciario.