En la unidad educativa Brasil, un niño de primer grado fue víctima de una agresión que le ha dejado secuelas permanentes. Según relata su madre, quien prefirió mantener su identidad en reserva, el menor fue pinchado en el ojo derecho con un lápiz por otro estudiante y, tras ser recogido por sus padres, comenzó a presentar fuertes dolores que obligaron a llevarlo a un centro de salud.
Lamentablemente, el diagnóstico no fue nada alentador. El menor presenta una perforación de iris y una desviación, lo que ha ocasionado la pérdida total de la vista en su ojo derecho. Además, ha debido someterse a dos cirugías y los médicos no garantizan que pueda recuperar su visión al 100%.
La madre del menor ha expresado su preocupación y malestar ante la falta de colaboración de la unidad educativa para determinar quién es el responsable de la agresión. «No han querido ayudarnos en nada. Solo nos dijeron que harían una rifa para recaudar dinero y hasta el momento no han cumplido», señaló en una entrevista exclusiva.
Ante la situación, la madre del niño ha solicitado ayuda legal para poder llevar adelante el caso de su hijo y encontrar al responsable de la agresión. «No podemos dejar que esto quede impune. Mi hijo ha sufrido mucho y hemos gastado más de Bs 25 mil en cirugías y medicamentos», agregó.
Desde la unidad educativa Brasil no se han pronunciado sobre el caso. Sin embargo, la madre del menor aseguró que su hijo fue retirado de la escuela debido a que no se aceptó su inscripción nuevamente. «No han querido admitir a mi hijo después de todo lo que ha pasado. Es una vergüenza», manifestó.
La familia del menor exige justicia y espera que las autoridades pertinentes tomen cartas en el asunto para esclarecer lo sucedido y garantizar que hechos como este no vuelvan a ocurrir. «Queremos que se haga justicia por mi hijo y por todas las víctimas de violencia escolar. Nadie merece pasar por algo así», concluyó la madre.