Se agudiza la escasez de dólares en Bolivia y está afectando directamente a los usuarios bancarios, quienes ahora enfrentan más restricciones en la habilitación de tarjetas de débito para compras en línea y una reducción de los montos permitidos para estas operaciones.
Un equipo de Gaceta del Sur constató esta situación tras comunicarse con Banco Sol y Banco Bisa para habilitar una tarjeta con el objetivo de realizar un pago en una aplicación móvil. La operadora informó que el servicio solo podía activarse por un máximo de 30 días y que el límite de compra establecido era de 50 dólares por mes. Del mismo modo se hizo la misma consulta al Banco Nacional de Bolivia (BNB), quienes indicaron los mismo, agregando que los 50 dólares por mes «solo eran para pagos de streaming».
El economista y exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB), José Gabriel Espinoza, explicó que la falta de divisas afecta de manera desigual a los bancos, lo que obliga a algunos a restringir los tiempos y montos de las transacciones en dólares. «Como el Banco Central ya no entrega dólares a los bancos, estos deben limitar ciertos servicios para evitar incumplimientos de pago», afirmó.
Desde la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) señalaron que la habilitación de tarjetas para compras en línea es una decisión de cada entidad financiera y que no existe una normativa específica que imponga restricciones. «Es una práctica común que los bancos establezcan parámetros de seguridad para evitar fraudes», indicó un comunicado oficial.
Sin embargo, la realidad es que algunos bancos han optado por permitir compras en línea solo en bolivianos, mientras que otros han endurecido sus políticas para transacciones en dólares. «Los bancos más vinculados a exportadores e industrias tienen más acceso a divisas, pero los que dependen de créditos PYME tienen más dificultades y deben ajustar sus servicios», explicó Espinoza.
La situación ha generado gran malestar entre los usuarios, quienes han recurrido a redes sociales para expresar sus quejas. Miles de publicaciones denuncian las restricciones bancarias y el impacto que tienen en sus actividades diarias.
A medida que la crisis de divisas se agudiza, los clientes bancarios en Bolivia deberán adaptarse a limitaciones cada vez mayores, mientras las autoridades aún no ofrecen soluciones claras para mitigar la escasez de dólares en el sistema financiero.