La excanciller del Estado, Karen Longaric, afirmó que la designación de Jacqueline Mercedes Murillo Prijic (hermana de Arturo Murillo) como cónsul de Bolivia en Miami fue una orden que tuvo que cumplir a pesar de las observaciones que expuso en us momento.
En una entrevista que concedió a Bolivia Tv la exautoridad de Relaciones Exteriores culpó directamente a Jeanine Áñez por favorecer a Arturo Murillo y designar a su hermana como cónsul de Bolivia en Miami, EEUU.
Longaric avaló, junto al gabinete de Áñez, los tres decretos que autorizaban la compra con sobreprecio de gases lacrimógenos y armamento no letal para el Ministerio de Defensa a través del Ministerio de Gobierno, negociado de $us 2,3 millones realizado por Arturo Murillo junto con sus principales colaboradores.
En la entrevista que concedió al canal estatal se lavó las manos respecto dicha designación y culpó directamente a la expresidenta Jeanine Áñez.
«(…) La instrucción vino de allá (…) obviamente que hablé con la Presidenta y hablé con el propio Murillo diciéndoles que ese nombramiento iba a traer complicaciones porque no era bueno que un hermano de un Ministro vaya en el servicio consular o en el servicio diplomático, pero fue una instrucción muy categórica desde la Presidencia respaldando, obviamente. Todos los nombramientos venían desde la Presidencia. Hubieron muchos nombramientos a los que me opuse, pero finalmente hay instrucciones de la Presidenta y, en ese sentido, se acató obviamente la instrucción de nombrarla a la hermana de Murillo», afirmó la exautoridad, quien no respondió a la consulta sobre su paradero, sin embargo se presume que se encontraría en Chile.