El alcalde de La Paz, Iván Arias, organizó una ceremonia denominada “Misa de la Esperanza”, donde instó a la empresa Kantutani a cumplir con su responsabilidad en la limpieza del lodo que ha afectado gravemente a una comunidad local. El evento, realizado en medio de la crisis, buscó unir a vecinos, autoridades y empresas en un esfuerzo común para superar los daños ocasionados.
“Pido que la empresa Kantutani sea iluminada por el Señor. Lo correcto es sentarse a hablar con los vecinos y hacer causa común,” afirmó Arias durante su intervención, enfatizando la importancia de la colaboración entre todos los actores involucrados.
El alcalde subrayó la magnitud del desastre, indicando que “tenemos 15.000 volquetas de lodo que hay que sacar” para restablecer la normalidad en la zona. Según Arias, el municipio ha movilizado maquinaria y personal, pero se requiere un esfuerzo conjunto para atender esta emergencia.
Vecinos afectados se sumaron a la misa, expresando su desesperación por las condiciones en las que viven tras el desastre. “Necesitamos soluciones rápidas y efectivas. Esto no puede seguir así,” declaró una residente de la zona, haciendo eco de la urgencia planteada por el alcalde.
La empresa Kantutani, señalada por Arias como clave en las tareas de limpieza, aún no ha emitido un pronunciamiento oficial. El alcalde insistió en que la participación de esta compañía es fundamental para avanzar en la remoción del lodo.
“Convoco a la empresa a que se sume con toda su capacidad. Este es un trabajo que no podemos realizar solos,” añadió la autoridad edil, haciendo un llamado al compromiso empresarial frente a esta crisis.
La “Misa de la Esperanza” no solo tuvo un componente espiritual, sino que también sirvió como un espacio para unir fuerzas y renovar la esperanza de los afectados. Arias concluyó con un mensaje de optimismo: “Juntos podemos superar este desafío si cada uno asume su responsabilidad.”
El caso ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de las empresas en situaciones de emergencia y la capacidad de las autoridades locales para enfrentar desastres. Por ahora, los afectados esperan acciones concretas tanto del municipio como de Kantutani.