Mikal, una pequeña de apenas un año y ocho meses ya fue víctima de maltrato brutal que le dejó con 140 días de impedimento, su pequeño cuerpecito tiene múltiples fracturas que ponen en riesgo su desarrollo emocional y físico.
El día jueves fue rescatada de su vivienda en Vinto, Cochabamba, a denuncia de los vecinos que alertaron a la Defensoría de la Niñez sobre los llantos desgarradores que se escuchaban de su hogar, donde vivía con su madrastra y la hermana de esta, que a su vez hacía de niñera y de quienes debía recibir amor y protección, pero no fue así.
Cuando llegó la Defensoría de la Niñez y Adolescencia del municipio de Vinto junto a la responsable Susana Becerra, se sorprendieron al ver a la niña desnuda, mojada y tiritando de frío. Cuando la pequeña Mikal vio a los funcionarios alzó los brazos, pidiendo auxilio y quejándose de dolor. Allí se percataron que la pequeña tenía una pierna inflamada y varios hematomas.
Becerra contó que al ver a la niña, la protegió con mantas para darle calor. La niñera al ser cuestionadas por la condición de Mikal afirmó que la estaba bañando.
“La niña estaba desnuda, la niñera que la cuidaba decía que la había bañado recientemente, pero estaba de frío y de miedo. Yo no la conozco, pero la niña se trepó de mi cuello y solo decía achichiu, achichiu, en ese momento la hemos cogido y la hemos envuelto con mantas para sacarla de esa casa y llevarla hasta el forense”, afirmó.
Relató que la madre de Mikal falleció durante el parto y desde ese entonces la pequeña vivía con sus abuelos maternos, pero hace cinco meses de este año su padre reclamó su custodia y se la llevó a vivir con su pareja llamada Sandra.
En mayo, el hombre viajó hasta Mapiri en La Paz para trabajar en una mina y dejó a su hija Mikal al cuidado de su pareja, ésta contrato su hermana como niñera, pero los vecinos de las mujeres denunciaron que la niña no recibía la atención necesaria, incluso afirmaron a los medios locales, que la pequeña salía días enteros a jugar en la calle junto a otros niños y eran los vecinos que le regalaban alimentos.
Los habitantes de esa zona relataron que una vez una de las vecinas ingresó al domicilio de Sandra cansada de escuchar los llantos de la bebé y encontró a Mikal llena de heces fecales.
Los reportes médicos señalan que la pequeña presenta lesiones en la clavícula, en uno de los brazos y en la pierna, sin contar los múltiples hematomas y rasguños y necesita una cirugía de urgencia.
La madrastra afirmó que las lesiones de la pequeña son producto de una caída. Sin embargo, la justicia envió a las dos agresoras a la cárcel con detención preventiva por tentativa de infanticidio.
La abuela materna de la pequeña pidió justicia para su nieta e imploró ayuda económica para concretar la cirugía que necesita la niña.