La Unión Europea (UE) calificó como ilegítima la juramentación de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela para el período 2025-2031. Según la jefa de la diplomacia comunitaria, Kaja Kallas, el líder chavista carece de «la legitimidad de un mandatario democráticamente elegido» tras ignorar los resultados electorales que, según la oposición, favorecen a Edmundo González Urrutia.
«Las autoridades venezolanas perdieron una oportunidad clave de respetar la voluntad del pueblo y asegurar una transición democrática transparente», afirmó Kallas en un comunicado en nombre de los 27 países miembros de la UE. La diplomática subrayó que el 28 de julio de 2024, millones de venezolanos votaron pacíficamente para determinar el futuro de su país, apoyando mayoritariamente a González Urrutia.
La UE basó su posición en las copias públicas de actas electorales que respaldan la victoria del opositor, mientras que las autoridades venezolanas se han negado a publicar los registros oficiales de las mesas electorales. «Los resultados anunciados no pueden ser reconocidos como representativos de la voluntad del pueblo», añadió Kallas.
El bloque europeo condenó el aumento de la represión en Venezuela desde las elecciones. «Las autoridades han endurecido el acoso contra la oposición, la sociedad civil y sus familias, encarcelando voces disidentes y forzando a miles al exilio», denunció. La UE destacó que más de 2.500 ciudadanos, incluidos menores, fueron arrestados tras los comicios.
Aunque reconoció la liberación de algunos detenidos, la UE insistió en que ninguno debió ser encarcelado. «Venezuela debe liberar a todos los presos políticos y poner fin a las detenciones arbitrarias, incluidas las de ciudadanos extranjeros y con doble nacionalidad», exigió la diplomacia europea.
Asimismo, el comunicado llamó al gobierno venezolano a cumplir con el Derecho Internacional, respetando las Convenciones de Viena y los derechos humanos fundamentales, como la libertad de expresión y el derecho de reunión pacífica.
La UE instó a Venezuela a colaborar con organismos internacionales, como la ONU y la Corte Penal Internacional, para abordar las violaciones a los derechos humanos. Según el bloque, la responsabilidad de resolver la crisis recae en las autoridades venezolanas.
Finalmente, la UE reafirmó su apoyo a quienes defienden la democracia en Venezuela y subrayó su compromiso con una salida negociada liderada por los venezolanos. «Seguiremos trabajando con todos los actores para fomentar el diálogo y restaurar la estabilidad política y el bienestar social en Venezuela», concluyó Kallas.