La reconocida educadora boliviana María Isabel Ballivián se convirtió en el punto focal de la ceremonia para anunciar el máximo apoyo de los Estados unidos el sistema educativo en la Casa Blanca.
En el evento, la Vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris describió el trabajo de los educadores como de vital importancia y destacó especialmente el trabajo que los programas de educación temprana que han ido desarrollando a pesar de las restricciones y los peligros de la pandemia COVID-19.
Ballivián fue la personalidad elegida por la Casa Blanca para representar a los miles de centros de educación infantil en los Estados unidos frente a la pandemia gracias a un complejo protocolo de seguridad, que les permite continuar operando bajo las condiciones más exigentes, con el objetivo de mantener el servicio que ofrecen a diario en sus comunidades para que miles de familias de los trabajadores puedan ir a sus fuentes de trabajo y así garantizar el sustento de sus hogares.
“Desde el fondo de mi corazón, aplaudo sus esfuerzos para hacer de la educación de la primera infancia una prioridad nacional. Si los padres y sus hijos pequeños no tienen acceso a una educación temprana de calidad, el camino para reabrir totalmente la economía post COVID-19 se hace mucho más difícil… El cuidado infantil de alta calidad depende de los educadores de la primera infancia, deben estar bien capacitados, bien compensados y tecnológicamente actualizados para asumir el reto…”, enfatizó Ballivián.
Durante el evento la Vicepresidenta Harris aseguró, de una manera muy emotiva, que como parte fundamental de su política para hacer frente a la pandemia, se realizará un incremento sustancial en el presupuesto anual destinado a los programas de educación infantil inicial, así como para el sistema educativo de los Estados Unidos en general. Dijo que la educación es uno de los pilares fundamentales de la lucha contra la pandemia y de la educación en los Estados Unidos.
“Mi madre tenía dos objetivos en la vida: criar a sus dos hijas y luchar contra el cáncer. Y cada día de la semana y muchos fines de semana, mi madre iba a trabajar. Y cuando lo hacía, mi hermana y yo caminábamos dos casas abajo hasta la casa de la señora Regina Shelton quien se convirtió en una segunda madre para nosotras. Ella además tenía un centro de cuidado infantil. Sin el cuidado que la señora Shelton nos proveía, mi madre no hubiese podido ir a trabajar, sin ese cuidado mi madre no hubiese podido hacer los aportes que hizo en su esfuerzo por encontrar una cura para el cáncer de mama. Les digo esto para destacar un punto que probablemente les resulte obvio: para muchas personas y particularmente muchas mujeres, los centros de cuidado infantil se han convertido en un prerequisito para poder trabajar; y para muchas otras, los centros de cuidado infantil son su trabajo”, contó visiblemente emocionada Harris.
La Vicepresidencia recordó también que el presupuesto para los centros de cuidado infantil se beneficiarán con la mayor inversión de la historia del país del norte alcanzando un total de 39 mil millones de dólares destinados a garantizar su funcionamiento financiando materiales, planillas de sueldos y hasta haciendo posibles las recontrataciones.
La educadora boliviana, nacida en La Paz, formada en Santa Cruz y de familia chuquisaqueña, es la Directora Ejecutiva del Centro de Desarrollo Infantil ACCA, un programa acreditado por NAEYC que atiende a más de 200 niños en riesgo en el condado de Fairfax, Virginia en los Estados Unidos.
Tiene más de 25 años de experiencia en el campo de la educación de la primera infancia trabajando para varias organizaciones sin fines de lucro de los EEUU y otros países. Como educadora innovadora, administradora senior, capacitadora, defensora y consultora, viene trabajando para mejorar la calidad del cuidado y la educación de los niños pequeños, además de fomentar estrategias para una mayor participación de las madres y padres, y promover iniciativas que fortalezcan el desarrollo profesional docente.