Sin control alguno el paso fronterizo de Desaguadero se convirtió en un tránsito libre de personas y en especial de alimentos que son trasladados en barcazas por bajo la esclusa que se encuentra sobre el río del mismo nombre. Esta actividad es común los martes y viernes de todas las semanas, sin medir consecuencias a pesar de la pandemia que aqueja a Bolivia y Perú.
Por ello el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, confirmó este hecho luego de la inspección realizada en el mes de febrero, motivo por el cual se instruyó a las Fuerzas Armadas elabore un plan acción de Lucha Contra el Contrabando.
En el lugar se observan botes llenos de comerciantes y cargados de mercadería, en su mayoría de contrabando.
Era común ver el contrabando ‘hormiga’ en la localidad fronteriza de Desaguadero. El tráfico ilegal de mercadería pasaba en bicicletas acondicionadas con soportes llenos de productos que llegaban de Perú. Hoy, esa imagen no es la misma. El paso ilícito disminuyó y optó por utilizar el lago Titicaca para llegar a poblados bolivianos, señala una nota de prensa difundida a través del Facebook.
Los principales productos que ingresan por la frontera de Perú son la papa, cebolla y tomate. Entre mayo y noviembre la papa ingresa de manera legal y de contrabando, porque los comerciantes declaran una parte y otra no, explican funcionarios de Senasag La Paz.
Además, remarca que cuando una persona quiere importar alimentos tiene que tener, obligatoriamente, su certificado de registro sanitario, sobre todo de alimentos perecederos (manzana, pera, uva, tomate, entre otros), previa presentación de una fotocopia de su cédula de identidad y el llenado de un formulario del Senasag.
También se informa que la Armada Boliviana utiliza Lanchas Patrulleras para realizar el patrullaje lacustre e interdicción de contrabando en el área del lago menor Titicaca, entre la frontera acuática con el vecino país del Perú.