El dirigente de Asociación Departamental de Productores de Hoja de Coca (Adepcoca), Armin Lluta, informó en una entrevista con Unitel, que su sector no asistió ayer a la reunión convocada por el Ministerio de Gobierno, por temor a la detención de sus dirigentes. «Nos acusan de la muerte del cabo (Miguel Ángel Quispe)», señaló.
El dirigente cocalero rechazó los acuerdos alcanzados para pacificar la zona.
“De antemano se rechaza porque es una imposición. Este (encuentro) no ha sido un diálogo, sino más bien una imposición por parte del Gobierno; hemos visto que ellos se han reunido antes y han planificado cómo hacer caer a la directiva de Armin Lluta”, dijo el dirigente, quien desde hace bastante tiempo se disputa con Elena Flores el liderazgo de los productores de coca de la región.
«No habían amplias garantías, nos están acusando sobre la muerte del cabo, quien murió por un impacto de bala, es una persecución política. Por eso no asistimos, porque temíamos ser detenidos», recalcó Lluta, quien acusó al bloque de Flores de gozar da una ventaja que ‘inclina la balanza’ en su favor por ser del Movimiento Al Socialismo (MAS).
Lluta dijo que el sector que integra buscó diálogo con instancias estatales pero sin éxito; sobre los acuerdos anunciados por el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, indicó que ellos no lo respaldan. Además, dijo que no permitieron el ingreso de una comisión de su bloque a la convocatoria, en la cual demandaban la presencia de Derechos Humanos y la Iglesia Católica.