El Movimiento al Socialismo (MAS) cambia por segunda vez su narrativa para posesionar su premisa de que en 2019 hubo un «golpe de Estado» en contra del expresidente Evo Morales. Primero se acusó al empresario de origen sudafricano Elon Musk de tener interés en el litio boliviano, por lo cual supuestamente financió las movilizaciones que derivaron en la renuncia del exmandatario, ahora dicen que Reino Unido tenía interés en este recurso y que ayudó al gobierno transitorio.
El 10 de noviembre, Morales dimitió a la Presidencia del país, luego de que una auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) confirmó que se cometió un fraude electoral para favorecerlo. En la mañana de esa jornada, antes de la renuncia, el ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, fue el primero en pedir a Evo que deje su cargo.
Pese a la contundencia del informe de la OEA que muestra que se usaron servidores alternos, se falsificaron firmas de jurados electorales y actas de votación, Evo Morales insistió que fue «víctima» de un «golpe de Estado». Desde su asilo en Argentina culpó a Musk de financiar las movilizaciones del 2019. Luego de que el MAS ganó las elecciones, a su ingreso al país continuó con ese discurso.
«El dueño de Tesla dice haber financiado del golpe de Estado, solo por el litio. En Estados Unidos existe gran preocupación por el litio, y este golpe es al litio. No quieren que nosotros le demos el valor agregado al litio como Estado, siempre quieren que nuestros recursos naturales estén en manos de las trasnacionales», afirmó en noviembre.
Después de meses se cambia de alocución y se culpa a Reino Unido de ayudar al gobierno transitorio, a cambio de beneficia a esa nación para que puedan explotar el litio. Esto surge a raíz de una nota de prensa de un periodista inglés de tendencia izquierdista, quien basado en supuestos informes de la Cancillería de Bolivia, dijo que su su país coadyuvó a la presidencia de Jeanine Áñez, por el recurso natural.
«Salen a la luz documentos obtenidos por Declassified UK que revelan participación de Reino Unido en golpe de Estado de Bolivia, de noviembre 2019, por su interés en el litio y que su embajada, en La Paz, trajo empresa de ciberseguridad vinculada con la CIA», escribió hoy Morales.
MAS articula a la prensa internacional
No es la primera ver que el MAS articula a la prensa internacional para sus objetivos políticos. Lo hizo también en la gestión pasada, cuando se publicó en el periódico estadounidense Washington Post un artículo de opinión para poner en duda el informe de la OEA y hacer creer que no hubo fraude.
La mayoría de la prensa boliviana tomó ese artículo como si fuera una nota periodística del diario norteamericano. Tras la polémica Washington Post aclaró que se trataba de un columna de opinión y no de un trabajo de sus periodistas. Ahora también mediante un artículo se trata nuevamente de sustentar la narrativa del «golpe de Estado».
Empresas binacional del litio con Argentina
Luego de la victoria del MAS, en octubre del 2020, el periódico El Potosí reveló que el exvicepresidente Álvaro García se reunió con el canciller argentino, Felipe Solá, para tratar el tema del litio y las relaciones binacionales. Esto se lo realizó sin que García sea parte del gobierno del presidente Luis Arce.
Evo Morales al llegar a Bolivia, por su paso por Uyuni (Potosí), manifestó que se reanudará la industrialización de ese mineral con una empresa binacional con el gobierno de Argentina, país en el cual estuvo refugiado por varios meses y donde se articuló políticamente.
«¿Por qué no una industria binacional (con Argentina)? Ese plan que teníamos está paralizado por ahora. (…) Ahora tenemos la gran oportunidad para retomar (este proyecto) con el compañero Lucho, presidente», manifestó Morales.