La inmobiliaria Kantutani negó ser responsable de la mazamorra en Bajo Llojeta, que dejó 40 casas afectadas y cobró la vida de una niña de cinco años. La empresa aseguró que los movimientos de tierra realizados en el Cementerio Los Andes no están relacionados con el deslizamiento.
En un comunicado, Kantutani afirmó que el desastre fue causado por el taponamiento del embovedado del río Pasajahuira, situado a 1,5 kilómetros del cementerio, y no por las obras realizadas en sus terrenos. “Las verificaciones técnicas respaldan esta información y serán presentadas para evitar malentendidos”, expresó la compañía.
La Alcaldía de La Paz refutó estas afirmaciones, señalando que los movimientos de tierra fueron los detonantes de la tragedia. “El responsable es el empresario del cementerio, que realizó un movimiento de tierras de manera irresponsable”, declaró el alcalde Iván Arias.
Según Arias, el deslizamiento fue ocasionado por una masa de más de 140 mil toneladas de tierra, que se desplazó y obstruyó el sistema pluvial. «La bóveda no se obstruye por la lluvia, ya habíamos realizado trabajos de limpieza anteriormente», enfatizó.
El alcalde también señaló que la empresa reconoció que hubo un taponamiento, pero no explicó las causas. “Es claro que el movimiento de tierras, sumado a las lluvias, provocó la obstrucción y el colapso del drenaje”, agregó.
Kantutani expresó su pesar por los hechos y la pérdida humana. Sin embargo, mantiene su postura sobre la independencia de las obras del cementerio y las causas de la mazamorra.
Arias aseguró que la Alcaldía ya presentó a la Fiscalía pruebas documentales y técnicas que señalan la responsabilidad del movimiento de tierras. “Toda la documentación necesaria ha sido entregada; ahora corresponde a las autoridades tomar las medidas adecuadas”, concluyó.
El caso sigue en investigación por parte del Ministerio Público, mientras las familias afectadas esperan soluciones y justicia ante esta tragedia.