La diputada de Comunidad Ciudadana (CC), Lissa Claros, criticó duramente al Gobierno de Luis Arce por su decisión de trasladar al gabinete a Santa Cruz para liderar las acciones contra los incendios que afectan el oriente del país desde hace tres meses. Según Claros, el enfoque del Ejecutivo es inapropiado y un “descaro”, al priorizar el gasto en hoteles y viáticos para ministros en lugar de apoyar a quienes están en la primera línea de combate contra el fuego.
«Están yendo de turismo, gastando en hoteles 5 estrellas y vuelos. Ese dinero debería destinarse a los verdaderos héroes: bomberos y voluntarios que están arriesgando sus vidas», expresó Claros en declaraciones a la prensa.
El presidente Luis Arce anunció el miércoles que tanto él como el vicepresidente David Choquehuanca y todo su gabinete se trasladarán a Santa Cruz para comandar las acciones contra los incendios, una decisión que llega tras meses de críticas por la falta de respuesta efectiva del gobierno frente a la crisis ambiental.
Claros calificó la medida como “tardía” y sostuvo que el Gobierno ya ha incurrido en los delitos de “biocidio” y “ecocidio”. “Luis Arce es el peor presidente que hemos tenido hasta ahora. ¿Se va a ir solo a sacarse fotos?”, cuestionó la legisladora, sugiriendo que la acción es más un gesto simbólico que una solución real.
Por su parte, el diputado Miguel Roca, también de Comunidad Ciudadana, destacó que la verdadera solución pasa por abrogar las llamadas “leyes incendiarias”, que permiten la quema de tierras. “Primero hablemos de las leyes ecocidas y después hagamos una agenda”, señaló, criticando además que el Gobierno busque la aprobación de créditos internacionales en lugar de resolver la crisis ambiental.
En referencia a la movilización de los sindicatos oficialistas, Roca fue enfático: «Que no nos vengan a hablar de créditos ni a amedrentar con sus bravucones de la COB. Son serviles e indignos a los intereses del gobierno por plata», afirmó en relación a la vigilia que mantienen dirigentes sindicales.
Finalmente, Claros subrayó que la solución no pasa por endurecer las penas contra quienes provocan incendios, sino por la derogación de las leyes que han permitido esta situación. “El gobierno es cómplice del desastre ambiental que vive el país”, concluyó.