El municipio de Coripata, en la región de Nor Yungas, ha sido escenario de un violento atraco que ha dejado un saldo trágico. Según información del sitio Yungas Noticias, dos delincuentes ingresaron a la vivienda de Gabriel Jilaya y su esposa Elizabeth, y los atacaron con machetes. Elizabeth resultó gravemente herida y tuvo que ser trasladada a La Paz, donde su estado de salud es crítico. Gabriel también resultó herido, pero no de gravedad.
Las autoridades han identificado a los autores del atraco como dos hombres, uno de ellos un ex trabajador de la pareja. Según se ha informado, los ladrones habrían planeado el robo y hoy en la mañana, alrededor de las 8:30, intentaron llevarlo a cabo. Se llevaron unos 10 mil bolivianos y huyeron en dirección al río Peri, pero fueron capturados por los vecinos en la zona conocida como «Mal paso».
La población enfurecida golpeó a los delincuentes, lo que provocó la muerte de uno de ellos. La Policía logró rescatar al otro ladrón, un joven de aproximadamente 20 años, pero no pudo hacer nada por el fallecido, quien murió debido a las lesiones sufridas durante la golpiza.
El alcalde del municipio de Coripata, Roger Vargas, expresó su consternación por los hechos y pidió a la población que no tome la justicia por su propia mano. «Es importante que la población confíe en las autoridades y que se denuncie cualquier acto delictivo para que se pueda actuar de manera oportuna», dijo en una declaración pública.
Por su parte, la Policía Nacional ha iniciado las investigaciones para esclarecer lo sucedido. «Vamos a determinar las responsabilidades correspondientes en este hecho y se aplicará todo el peso de la ley a los responsables», afirmó el comandante de la Policía en Nor Yungas, Jorge Ignacio.
Este violento atraco ha generado consternación en la población de Coripata y ha vuelto a poner en la palestra la problemática de la inseguridad ciudadana en Bolivia. «Es necesario que las autoridades tomen medidas más eficaces para combatir la delincuencia y proteger a la población», expresó uno de los vecinos de la zona.
En momentos de dolor, la solidaridad de la población se hizo presente. «Nuestra solidaridad y apoyo a la familia Jilaya en estos momentos difíciles. Esperamos que pronto puedan recuperarse de lo sucedido», expresó una vecina en redes sociales.