Your Content Goes Here
Una veintena de trabajadores de la prensa independiente de las ciudades de La Paz y El Alto este lunes protagonizaron un mitin de protesta en Plaza Murillo donde se declararon en estado de emergencia ante la no atención de sus demandas por parte las autoridades de Gobierno.
Karina Cardozo dijo que hace cinco meses los bolivianos “nos encontramos sumidos en una profunda crisis sanitaria desde la presencia del coronavirus, ha obligado a cambiar nuestro ritmo de vida”.
“Es por ese motivo que los trabajadores de la prensa de base de las ciudades de La Paz y El Alto nos declaramos en estado de emergencia porque no hemos logrado ser escuchados ante tantas solicitudes que se han efectuado a las autoridades nacionales y locales para que ayuden a muchos de nuestros compañeros que al estar en primera línea de trabajo y contrajeron la enfermedad y otros aun están en peligro de contraerla”, dijo enfáticamente.
Mencionó que en el último tiempo “varios compañeros periodistas” perdieron la vida en la lucha de informar a la población sobre la propagación de esta enfermedad. “Por eso exigimos que de inmediato se ponga en ejecución el denominado Seguro privado de Vida e invalidez ley 315 del 10 de diciembre del 2012 para los trabajadores de prensa que desde hace más de diez años lo venimos exigiendo y nadie hace caso al respecto”.
Cardozo recordó a las autoridades que el 80% de los trabajadores de la prensa son productores independientes, quienes sufrieron la suspensión de la pauta publicitaria del Estado que deja sin sustento a muchas familias “ya que como pequeños emprendimientos comunicacionales también somos generadores de empleo, el apoyo publicitario del Estado, es una fuente de ingresos principal ahora quedándonos sin ningún respaldo para o afrontar la salud y mucho menos con obligaciones impositivas”.
En ese sentido exigen también el pago de publicidad del 2019 que hasta la fecha no se hizo efectivo con el argumento de que no habría dinero “cuando bien sabemos que el presupuesto de ese pago fue aprobado” con el anterior presupuesto general del Estado.
Al respecto expresó su extrañeza que solo grandes cadenas de televisión y radio se beneficien con los ingresos que son de todos los bolivianos.
“También repudiamos los despidos injustificados sin goce de beneficios como ocurrió con los compañeros de los periódicos la Razón y Bolivia, radio Patria Nueva y ABI donde el Gobierno no respeto la inamovilidad laboral normada por ley y que hasta la fecha los compañeros no reciben respuesta pese al compromiso gubernamental de que no habrá despidos como consecuencia de la pandemia. Asimismo, exigimos el respeto al trabajo de la prensa ya que constantemente somos víctimas de violencia”, sostuvo.
Por todos esos motivos, dijo que el sector se declaró en estado de emergencia a la espera de ser atendidos en sus demandas.
Minutos después un grupo de periodistas fueron recibidos en audiencia por el director de Coordinacion con Movimientos Sociales, Rafael Quispe, quien a pesar de su apretada agenda escuchó las distintas demandas y se comprometió a tener una respuesta este miércoles.